Ingredientes
Elaboración
Batimos los huevos junto con el azúcar, en un recipiente grande, hasta que adquieran un aspecto blanquecino y cremoso.
Al recipiente le añadimos la ralladura de limón, el anís en grano, el zumo de limón, anís y aceite. Volvemos a mezclar todo bien hasta que quede una masa única.
En un bol separado mezclamos la harina con la levadura, amasando bien para que quede muy compacta.
Poco a poco vamos añadiendo la harina mezclada con la levadura mientras no dejamos de remover la masa para que se mezcle bien. Obtendremos una masa esponjosa.
Dejamos que esta masa repose de hora a hora y media.
Después vamos cogiendo trozos de la masa y las damos una forma parecida a croquetas grandes, no hace falta que queden con la forma perfecta.
Ponemos aceite de oliva virgen a calentar, cuando esté bien caliente vamos metiendo los huesillos en la sartén, poco a poco para que se hagan bien. Cuando los estemos friendo, es necesario hacerlo a fuego medio para que se hagan por igual y no queden crudos por dentro y refritos por fuera.
Una vez fritos, los depositamos sobre papel absorbente para quitar el exceso de aceite.